El Open de Australia de tenis no obligará a los tenistas a informar sobre los casos positivos de Covid-19 durante el torneo
El coronavirus no será un problema para los tenistas que participen en el Abierto de Australia de este 2023: los jugadores que den positivo por COVID no tendrán ningún impedimento para competir en el primer Grand Slam del año, según indicó el director del torneo, Craig Tiley.
Desde la organización del torneo lo tienen muy claro: «Se lo hemos afirmado a nuestros jugadores, así como a nuestros más de 12.000 empleados. Si alguien no se encuentra bien, que se quede en casa. Es un entorno normalizado para nosotros y, al igual que en el críquet, habrá jugadores que competirán potencialmente con COVID», advirtió Tiley en declaraciones recogidas por la cadena ‘Nine News’.
El directivo del Abierto de Australia dijo que sería responsabilidad de los tenistas revelar un resultado positivo a los organizadores. «Solo queríamos seguir lo que está actualmente sucediendo en la comunidad. Hemos ido un paso más allá al hacer una recomendación sobre mantenerse alejado cuando uno está enfermo, y nuestro personal médico continuará monitoreando eso, también con los jugadores individualmente», añadió
La postura del Open de Australia es radical respecto a la edición del año pasado, la cual estuvo marcada por la deportación de un Djokovic que no estaba vacunado contra el virus, a pesar de solicitar una exención que, a priori, fue aceptada por el Gobierno.
🏆🙏🏼💪🏼😘❤️🎾🇦🇺🇷🇸 #adelaideinternational pic.twitter.com/pPJw3fYCDT— Novak Djokovic (@DjokerNole) January 8, 2023
Desde entonces, el país australiano ha suprimido, totalmente, la obligación de vacunar a las personas para entrar en Australia y el Gobierno ha retirado a Novak la prohibición de entrar al país (que se le aplicó tras su deportación) durante tres años. El serbio, que fue campeón en Adelaida tras doblegar a Korda, es el máximo favorito para alzarse con el primer Slam del año y conseguir su décimo Abierto de Australia.

El coronavirus no será un problema para los tenistas que participen en el Abierto de Australia de este 2023: los jugadores que den positivo por COVID no tendrán ningún impedimento para competir en el primer Grand Slam del año, según indicó el director del torneo, Craig Tiley. Desde la organización del torneo lo tienen muy claro: "Se lo hemos afirmado a nuestros jugadores, así como a nuestros más de 12.000 empleados. Si alguien no se encuentra bien, que se quede en casa. Es un entorno normalizado para nosotros y, al igual que en el críquet, habrá jugadores que competirán potencialmente con COVID", advirtió Tiley en declaraciones recogidas por la cadena 'Nine News'. El directivo del Abierto de Australia dijo que sería responsabilidad de los tenistas revelar un resultado positivo a los organizadores. "Solo queríamos seguir lo que está actualmente sucediendo en la comunidad. Hemos ido un paso más allá al hacer una recomendación sobre mantenerse alejado cuando uno está enfermo, y nuestro personal médico continuará monitoreando eso, también con los jugadores individualmente", añadió La postura del Open de Australia es radical respecto a la edición del año pasado, la cual estuvo marcada por la deportación de un Djokovic que no estaba vacunado contra el virus, a pesar de solicitar una exención que, a priori, fue aceptada por el Gobierno. 🏆🙏🏼💪🏼😘❤️🎾🇦🇺🇷🇸 #adelaideinternational pic.twitter.com/pPJw3fYCDT— Novak Djokovic (@DjokerNole) January 8, 2023 Desde entonces, el país australiano ha suprimido, totalmente, la obligación de vacunar a las personas para entrar en Australia y el Gobierno ha retirado a Novak la prohibición de entrar al país (que se le aplicó tras su deportación) durante tres años. El serbio, que fue campeón en Adelaida tras doblegar a Korda, es el máximo favorito para alzarse con el primer Slam del año y conseguir su décimo Abierto de Australia.
El coronavirus no será un problema para los tenistas que participen en el Abierto de Australia de este 2023: los jugadores que den positivo por COVID no tendrán ningún impedimento para competir en el primer Grand Slam del año, según indicó el director del torneo, Craig Tiley.
Desde la organización del torneo lo tienen muy claro: «Se lo hemos afirmado a nuestros jugadores, así como a nuestros más de 12.000 empleados. Si alguien no se encuentra bien, que se quede en casa. Es un entorno normalizado para nosotros y, al igual que en el críquet, habrá jugadores que competirán potencialmente con COVID», advirtió Tiley en declaraciones recogidas por la cadena ‘Nine News’.
El directivo del Abierto de Australia dijo que sería responsabilidad de los tenistas revelar un resultado positivo a los organizadores. «Solo queríamos seguir lo que está actualmente sucediendo en la comunidad. Hemos ido un paso más allá al hacer una recomendación sobre mantenerse alejado cuando uno está enfermo, y nuestro personal médico continuará monitoreando eso, también con los jugadores individualmente», añadió
La postura del Open de Australia es radical respecto a la edición del año pasado, la cual estuvo marcada por la deportación de un Djokovic que no estaba vacunado contra el virus, a pesar de solicitar una exención que, a priori, fue aceptada por el Gobierno.
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— Novak Djokovic (@DjokerNole) January 8, 2023
Desde entonces, el país australiano ha suprimido, totalmente, la obligación de vacunar a las personas para entrar en Australia y el Gobierno ha retirado a Novak la prohibición de entrar al país (que se le aplicó tras su deportación) durante tres años. El serbio, que fue campeón en Adelaida tras doblegar a Korda, es el máximo favorito para alzarse con el primer Slam del año y conseguir su décimo Abierto de Australia.