Esta es la historia de Rod Laver, el mito del tenis que da nombre a la Laver Cup en la que se retirará Roger Federer
Mucha emoción, grandes estrellas y excesivo lujo, estos son los ingredientes de la competición impulsada por Roger Federer que cautivará este fin de semana a millones de espectadores por ser el escenario de su propia retirada… pero, ¿por qué se llama Laver Cup?
En un intento por engrandecer una competición de formato atractivo pero de nula relevancia para el ránking profesional -pues no otorga puntos ATP, por el momento-, los creadores de esta competición decidieron engalanarla con el nombre de uno de los tenistas más importantes de la historia, el australiano Rod Laver.
El hombre que también da nombre a la pista principal de Open de Australia, la Rod Laver Arena, nació en Queensland en el año 1938 en el seno de una familia ganadera. Allí, concretamente en el patio trasero de la granja, comenzó a hacer sus pinitos en el deporte de la raqueta, dando así el pistoletazo de salida a una carrera repleta de éxitos.
Tan solo tenía 15 años cuando, con su juego veloz y potente, llamó la atención de otra leyenda del tenis australiano, Harry Hopman, quien le convenció para mudarse a Brisbane para dedicarse a tiempo completo al tenis. Tres años después ya formaba parte de la convocatoria de la selección australiana para la Copa Davis y en siete, levantaba ya su primer Grand Slam, el de Australia.
El resto es historia: 11 Grand Slams individuales, 9 de dobles y 39 títulos individuales en la Era Open… aunque los expertos los cifran en 200 triunfos contando aquellos que ganó antes de su profesionalización en 1963. Pero por encima de todos esos éxitos, uno que solo él ha conseguido en el circuito masculino, completar el Grand Slam (ganar los cuatro grandes) en un mismo año, un hito que logro en 1962 y 1969.
Tal y como reza la página oficial de la Laver Cup: «Cualquiera que haya visto jugar a ‘Rocket’ Rod Laver recordará su potencia, velocidad y precisión. También vieron a un hombre humilde que conocía el trabajo requerido para la grandeza y el respeto y el amor que se necesitaba mostrar a los oponentes y al deporte mismo. Sigue siendo un manantial eterno de inspiración para las generaciones futuras».
A sus 84 años, Laver sigue manteniendo el vínculo con el deporte de la raqueta, y es un fijo en la grada de la Rod Laver Arena en los grandes encuentros del Open de Australia. En la última edición, en la que Rafa Nadal se impuso en un maratoniano partido de más de cinco horas a Daniil Medvedev, protagonizó un bonito momento con el español, al que fue a felicitar personalmente al vestuario.
Mucha emoción, grandes estrellas y excesivo lujo, estos son los ingredientes de la competición impulsada por Roger Federer que cautivará este fin de semana a millones de espectadores por ser el escenario de su propia retirada… pero, ¿por qué se llama Laver Cup?
En un intento por engrandecer una competición de formato atractivo pero de nula relevancia para el ránking profesional -pues no otorga puntos ATP, por el momento-, los creadores de esta competición decidieron engalanarla con el nombre de uno de los tenistas más importantes de la historia, el australiano Rod Laver.
El hombre que también da nombre a la pista principal de Open de Australia, la Rod Laver Arena, nació en Queensland en el año 1938 en el seno de una familia ganadera. Allí, concretamente en el patio trasero de la granja, comenzó a hacer sus pinitos en el deporte de la raqueta, dando así el pistoletazo de salida a una carrera repleta de éxitos.
Tan solo tenía 15 años cuando, con su juego veloz y potente, llamó la atención de otra leyenda del tenis australiano, Harry Hopman, quien le convenció para mudarse a Brisbane para dedicarse a tiempo completo al tenis. Tres años después ya formaba parte de la convocatoria de la selección australiana para la Copa Davis y en siete, levantaba ya su primer Grand Slam, el de Australia.
El resto es historia: 11 Grand Slams individuales, 9 de dobles y 39 títulos individuales en la Era Open… aunque los expertos los cifran en 200 triunfos contando aquellos que ganó antes de su profesionalización en 1963. Pero por encima de todos esos éxitos, uno que solo él ha conseguido en el circuito masculino, completar el Grand Slam (ganar los cuatro grandes) en un mismo año, un hito que logro en 1962 y 1969.
Tal y como reza la página oficial de la Laver Cup: «Cualquiera que haya visto jugar a ‘Rocket’ Rod Laver recordará su potencia, velocidad y precisión. También vieron a un hombre humilde que conocía el trabajo requerido para la grandeza y el respeto y el amor que se necesitaba mostrar a los oponentes y al deporte mismo. Sigue siendo un manantial eterno de inspiración para las generaciones futuras«.
A sus 84 años, Laver sigue manteniendo el vínculo con el deporte de la raqueta, y es un fijo en la grada de la Rod Laver Arena en los grandes encuentros del Open de Australia. En la última edición, en la que Rafa Nadal se impuso en un maratoniano partido de más de cinco horas a Daniil Medvedev, protagonizó un bonito momento con el español, al que fue a felicitar personalmente al vestuario.