Nadal ‘afila’ sus garras antes de Wimbledon: dos tests muy satisfactorios y sin rastros de problemas en el pie

Apenas faltan unos días para que de comienzo Wimbledon. El tercer Grand Slam de la temporada dará a conocer a su ganador en dos semanas. ¿Será Rafa Nadal u otro tenista? La respuesta llegará pronto, pero hay pistas.
El balear hace poco más de dos semanas iba en muletas tras ganar Roland Garros y someterse a un nuevo tratamiento en su pie. Ahora parece que puede plantarle cara a casi cualquiera y más tras lo demostrado en Hurlingham.
Muchas dudas azotaban a Nadal y a su entorno tras los quebraderos de cabeza sufridos en la extremidad del tenista, pero todo parece haberse quedado atrás.
Dos tests satisfactorios
Nadal llegaba a Londres con la mente puesta en ir dando pequeños pasos para estar en el cuadro final del torneo. Y ha cumplido el objetivo de manera muy satisfactoria o, al menos, eso es lo que refleja lo visto en la pista.
Él mismo ya dijo que «era demasiado mayor para jugar tantos partidos» cuando fue preguntado sobre su ausencia en los típicos torneos preparatorios como Halle o Queen’s. Daba a entender que para él su mejor manera de aclimatarse era a través de cortas tomas de contacto.
Y eso es lo que se ha visto en Hurlingham. Dos partidos, una victoria y una derrota. Frente a Wawrinka se mostró como un auténtico torbellino, donde no llegó a darle ninguna oportunidad al estadounidense y alzándose con un triunfo claro.
Contra Félix Auger-Aliassime acabó claudicando en el ‘super tie-break’. No obstante, se vio a un Nadal enchufado. Luchó hasta donde le dieron las fuerzas frente a un jugador de gran nivel, top ten de la ATP, y que llegaba bastante más rodado que él.
El canadiense acumulaba siete partidos más que el español sobre el césped, por lo que estaba mucho más acostumbrado a la superficie y, pese a eso, estuvo contra la cuerdas frente a Nadal.
Sin rastro del problema en el pie
La mayor preocupación más allá de las victorias o derrotas, a buen recaudo, habrá sido su pie. Tras el mal trago vivido en mayo tras los problemas sufridos en Roland Garros, parece haber hecho efecto el nuevo tratamiento.
Y así se ha encargado de reconocerlo Marc López, parte del staff técnico de Nadal. «El tema del pie, que era lo que más preocupa siempre, va bien. Tenemos que acabar de ajustar los entrenos, el otro día jugó muy bien en la exhibición y estar preparados para el partido del martes», señala sobre su presencia en Wimbledon.
«Todos los entrenos suman, incluso aquellos en los que no te sientes bien, porque te sirven para corregir cosas de cara al siguiente», terminó de concretar López sobre las sensaciones de Nadal.
Dos buenas noticias para él, que buscará alzarse en Wimbledon con su tercer Grand Slam de la temporada y con el tercero de su cuenta particular.

Nadal ‘afila’ sus garras antes de Wimbledon: dos tests muy satisfactorios y sin rastros de problemas en el pie

Apenas faltan unos días para que de comienzo Wimbledon. El tercer Grand Slam de la temporada dará a conocer a su ganador en dos semanas. ¿Será Rafa Nadal u otro tenista? La respuesta llegará pronto, pero hay pistas. El balear hace poco más de dos semanas iba en muletas tras ganar Roland Garros y someterse a un nuevo tratamiento en su pie. Ahora parece que puede plantarle cara a casi cualquiera y más tras lo demostrado en Hurlingham. Muchas dudas azotaban a Nadal y a su entorno tras los quebraderos de cabeza sufridos en la extremidad del tenista, pero todo parece haberse quedado atrás. Dos tests satisfactorios Nadal llegaba a Londres con la mente puesta en ir dando pequeños pasos para estar en el cuadro final del torneo. Y ha cumplido el objetivo de manera muy satisfactoria o, al menos, eso es lo que refleja lo visto en la pista. Él mismo ya dijo que "era demasiado mayor para jugar tantos partidos" cuando fue preguntado sobre su ausencia en los típicos torneos preparatorios como Halle o Queen's. Daba a entender que para él su mejor manera de aclimatarse era a través de cortas tomas de contacto. Y eso es lo que se ha visto en Hurlingham. Dos partidos, una victoria y una derrota. Frente a Wawrinka se mostró como un auténtico torbellino, donde no llegó a darle ninguna oportunidad al estadounidense y alzándose con un triunfo claro. Contra Félix Auger-Aliassime acabó claudicando en el 'super tie-break'. No obstante, se vio a un Nadal enchufado. Luchó hasta donde le dieron las fuerzas frente a un jugador de gran nivel, top ten de la ATP, y que llegaba bastante más rodado que él. El canadiense acumulaba siete partidos más que el español sobre el césped, por lo que estaba mucho más acostumbrado a la superficie y, pese a eso, estuvo contra la cuerdas frente a Nadal. Sin rastro del problema en el pie La mayor preocupación más allá de las victorias o derrotas, a buen recaudo, habrá sido su pie. Tras el mal trago vivido en mayo tras los problemas sufridos en Roland Garros, parece haber hecho efecto el nuevo tratamiento. Y así se ha encargado de reconocerlo Marc López, parte del staff técnico de Nadal. "El tema del pie, que era lo que más preocupa siempre, va bien. Tenemos que acabar de ajustar los entrenos, el otro día jugó muy bien en la exhibición y estar preparados para el partido del martes", señala sobre su presencia en Wimbledon. "Todos los entrenos suman, incluso aquellos en los que no te sientes bien, porque te sirven para corregir cosas de cara al siguiente", terminó de concretar López sobre las sensaciones de Nadal. Dos buenas noticias para él, que buscará alzarse en Wimbledon con su tercer Grand Slam de la temporada y con el tercero de su cuenta particular.

Apenas faltan unos días para que de comienzo Wimbledon. El tercer Grand Slam de la temporada dará a conocer a su ganador en dos semanas. ¿Será Rafa Nadal u otro tenista? La respuesta llegará pronto, pero hay pistas.

El balear hace poco más de dos semanas iba en muletas tras ganar Roland Garros y someterse a un nuevo tratamiento en su pie. Ahora parece que puede plantarle cara a casi cualquiera y más tras lo demostrado en Hurlingham.

Muchas dudas azotaban a Nadal y a su entorno tras los quebraderos de cabeza sufridos en la extremidad del tenista, pero todo parece haberse quedado atrás.

Dos tests satisfactorios

Nadal llegaba a Londres con la mente puesta en ir dando pequeños pasos para estar en el cuadro final del torneo. Y ha cumplido el objetivo de manera muy satisfactoria o, al menos, eso es lo que refleja lo visto en la pista.

Él mismo ya dijo que «era demasiado mayor para jugar tantos partidos» cuando fue preguntado sobre su ausencia en los típicos torneos preparatorios como Halle o Queen’s. Daba a entender que para él su mejor manera de aclimatarse era a través de cortas tomas de contacto.

Y eso es lo que se ha visto en Hurlingham. Dos partidos, una victoria y una derrota. Frente a Wawrinka se mostró como un auténtico torbellino, donde no llegó a darle ninguna oportunidad al estadounidense y alzándose con un triunfo claro.

Contra Félix Auger-Aliassime acabó claudicando en el ‘super tie-break’. No obstante, se vio a un Nadal enchufado. Luchó hasta donde le dieron las fuerzas frente a un jugador de gran nivel, top ten de la ATP, y que llegaba bastante más rodado que él.

El canadiense acumulaba siete partidos más que el español sobre el césped, por lo que estaba mucho más acostumbrado a la superficie y, pese a eso, estuvo contra la cuerdas frente a Nadal.

Sin rastro del problema en el pie

La mayor preocupación más allá de las victorias o derrotas, a buen recaudo, habrá sido su pie. Tras el mal trago vivido en mayo tras los problemas sufridos en Roland Garros, parece haber hecho efecto el nuevo tratamiento.

Y así se ha encargado de reconocerlo Marc López, parte del staff técnico de Nadal. «El tema del pie, que era lo que más preocupa siempre, va bien. Tenemos que acabar de ajustar los entrenos, el otro día jugó muy bien en la exhibición y estar preparados para el partido del martes«, señala sobre su presencia en Wimbledon.

«Todos los entrenos suman, incluso aquellos en los que no te sientes bien, porque te sirven para corregir cosas de cara al siguiente», terminó de concretar López sobre las sensaciones de Nadal.

Dos buenas noticias para él, que buscará alzarse en Wimbledon con su tercer Grand Slam de la temporada y con el tercero de su cuenta particular.