Paula Badosa cae en Indian Wells con la griega Sakkari y se esfuma el sueño de emular a Navratilova
El idilio de Paula Badosa con Indian Wells terminó este viernes. La griega Maria Sakkari derrotó en semifinales a la vigente campeona y rompió así el sueño de la tenista española, que aspiraba a un doblete histórico en el torneo del desierto californiano.
En una noche muy complicada para Badosa y en la que no estuvo nada cómoda sobre la pista, Sakkari, sexta del ránking de la WTA, se impuso por 6-2, 4-6 y 6-1 en una hora y 48 minutos.
De esta forma, Martina Navratilova seguirá por ahora como la única en ganar dos veces seguidas en Indian Wells (1990 y 1991).
Sakkari se enfrentará en la final a la polaca Iga Swiatek, cuarta del ránking mundial y que hoy venció a la rumana Simona Halep por 7-6(6) y 6-4 en una hora y 49 minutos
Badosa, séptima de la clasificación de la WTA, había pasado el rodillo hasta hoy haciendo gala de una enorme fortaleza con su saque y su juego desde el fondo.
Pero esas dos armas le fallaron en la antesala de la final, ya que Badosa se enredó con 7 dobles faltas, solo ganó el 56 % de sus puntos con primer saque y sufrió ante una derecha muy potente y agresiva de la griega.
Más sólida en la mayor parte del encuentro, Sakkari fue además la primera tenista en el torneo que llegó a igualar el despliegue físico y la constancia de Badosa, dos de sus señas de identidad.
Con esta derrota de Badosa, las opciones del tenis español en este Masters 1000 pasan ahora por el cuadro masculino, donde el sábado se enfrentarán Rafa Nadal y Carlos Alcaraz por un puesto en la final del domingo.
El partido empezó con turbulencias: Sakkari perdió su saque tras un afortunado golpe en la cinta de Badosa, mientras que la española concedió también un «break» con un juego en blanco de la griega al resto (1-1).
Sakkari se recuperó pronto con su muy peligrosa derecha pero Badosa seguía muy fría.
A diferencia de otros encuentros en los que de principio a fin era una roca, Badosa tuvo muchos problemas para meter su primer servicio, cometió 3 dobles faltas en sus dos primeros turnos al saque y entregó un nuevo «break» en un preocupante comienzo (3-1).
Badosa contó con un 15-40 para regresar al encuentro, pero Sakkari, con mucha decisión y entereza, solventó ese problema para seguir mandando (4-1).
Buscaba sensaciones Badosa pero su firmeza en el servicio no aparecía.
En cambio, Sakkari se mostraba muy enchufada al duelo, levantando el puño con cada punto ganado, y coleccionaba restos fabulosos con derechas y reveses a la línea que desconcertaban a Badosa.
Sakkari dominaba el partido con una fantástica potencia desde el fondo de la pista y movía a una Badosa que lo intentaba todo y que miraba a su equipo con los brazos en jarra en busca de soluciones.
No las encontró en un primer set que se llevó Sakkari con un nuevo «break» y una autoridad asombrosa (6-2 en 35 minutos).
Un partido lleno de contrastes
Badosa no había perdido un set en todo el torneo así que la reacción pasaba por recuperar su fiabilidad en el saque, algo que consiguió en el inicio del segundo set (1-1).
Con esa chispa pareció despertar Badosa, que empezó a tirar con más fuerza, que ahora sí disputaba a Sakkari los peloteos más largos y que se reenganchó al duelo con rabia rompiendo el saque con un juego en blanco (1-2). El partido discurría entre altibajos.
Badosa perdió de nuevo su servicio, con una derecha de Sakkari que era un auténtico tormento y otra doble falta que le desesperó, pero acto seguido logró otro «break» para seguir por delante (2-3).
Consolidó por fin esa rotura en su mejor momento hasta entonces (2-4) y, compensando con sufrimiento y crujir de dientes su falta de acierto, Badosa se colocó al borde de llevarse la segunda manga ante una Sakkari cada vez más fallona (3-5).
Paradójicamente, fueron su saque y su derecha, muy intermitentes hasta entonces, los que brillaron para darle el segundo set por 4-6 tras 42 minutos.
Sakkari parecía tocada pero se recuperó con un enorme grito tras ganar el servicio en el primer juego del set definitivo. El encuentro se movía entonces por sutiles cambios de ánimo.
Dos errores no forzados de Badosa le hicieron perder el saque y dieron alas a Sakkari (2-0), pero la española, con una gran derecha paralela, rompió asimismo el servicio a la griega y tomó aire (2-1).
Sin embargo, la demoledora derecha de Sakkari volvió a darle un nuevo «break» (3-1) en el que a la postre resultó el juego clave del partido.
Tras muchos vaivenes, Sakkari se refugió en la solidez de su saque y acabó finalmente con el sueño de Badosa en Indian Wells.
El idilio de Paula Badosa con Indian Wells terminó este viernes. La griega Maria Sakkari derrotó en semifinales a la vigente campeona y rompió así el sueño de la tenista española, que aspiraba a un doblete histórico en el torneo del desierto californiano.
En una noche muy complicada para Badosa y en la que no estuvo nada cómoda sobre la pista, Sakkari, sexta del ránking de la WTA, se impuso por 6-2, 4-6 y 6-1 en una hora y 48 minutos.
De esta forma, Martina Navratilova seguirá por ahora como la única en ganar dos veces seguidas en Indian Wells (1990 y 1991).
Sakkari se enfrentará en la final a la polaca Iga Swiatek, cuarta del ránking mundial y que hoy venció a la rumana Simona Halep por 7-6(6) y 6-4 en una hora y 49 minutos
Badosa, séptima de la clasificación de la WTA, había pasado el rodillo hasta hoy haciendo gala de una enorme fortaleza con su saque y su juego desde el fondo.
Pero esas dos armas le fallaron en la antesala de la final, ya que Badosa se enredó con 7 dobles faltas, solo ganó el 56 % de sus puntos con primer saque y sufrió ante una derecha muy potente y agresiva de la griega.
Más sólida en la mayor parte del encuentro, Sakkari fue además la primera tenista en el torneo que llegó a igualar el despliegue físico y la constancia de Badosa, dos de sus señas de identidad.
Con esta derrota de Badosa, las opciones del tenis español en este Masters 1000 pasan ahora por el cuadro masculino, donde el sábado se enfrentarán Rafa Nadal y Carlos Alcaraz por un puesto en la final del domingo.
El partido empezó con turbulencias: Sakkari perdió su saque tras un afortunado golpe en la cinta de Badosa, mientras que la española concedió también un «break» con un juego en blanco de la griega al resto (1-1).
Sakkari se recuperó pronto con su muy peligrosa derecha pero Badosa seguía muy fría.
A diferencia de otros encuentros en los que de principio a fin era una roca, Badosa tuvo muchos problemas para meter su primer servicio, cometió 3 dobles faltas en sus dos primeros turnos al saque y entregó un nuevo «break» en un preocupante comienzo (3-1).
Badosa contó con un 15-40 para regresar al encuentro, pero Sakkari, con mucha decisión y entereza, solventó ese problema para seguir mandando (4-1).
Buscaba sensaciones Badosa pero su firmeza en el servicio no aparecía.
En cambio, Sakkari se mostraba muy enchufada al duelo, levantando el puño con cada punto ganado, y coleccionaba restos fabulosos con derechas y reveses a la línea que desconcertaban a Badosa.
Sakkari dominaba el partido con una fantástica potencia desde el fondo de la pista y movía a una Badosa que lo intentaba todo y que miraba a su equipo con los brazos en jarra en busca de soluciones.
No las encontró en un primer set que se llevó Sakkari con un nuevo «break» y una autoridad asombrosa (6-2 en 35 minutos).
Un partido lleno de contrastes
Badosa no había perdido un set en todo el torneo así que la reacción pasaba por recuperar su fiabilidad en el saque, algo que consiguió en el inicio del segundo set (1-1).
Con esa chispa pareció despertar Badosa, que empezó a tirar con más fuerza, que ahora sí disputaba a Sakkari los peloteos más largos y que se reenganchó al duelo con rabia rompiendo el saque con un juego en blanco (1-2). El partido discurría entre altibajos.
Badosa perdió de nuevo su servicio, con una derecha de Sakkari que era un auténtico tormento y otra doble falta que le desesperó, pero acto seguido logró otro «break» para seguir por delante (2-3).
Consolidó por fin esa rotura en su mejor momento hasta entonces (2-4) y, compensando con sufrimiento y crujir de dientes su falta de acierto, Badosa se colocó al borde de llevarse la segunda manga ante una Sakkari cada vez más fallona (3-5).
Paradójicamente, fueron su saque y su derecha, muy intermitentes hasta entonces, los que brillaron para darle el segundo set por 4-6 tras 42 minutos.
Sakkari parecía tocada pero se recuperó con un enorme grito tras ganar el servicio en el primer juego del set definitivo. El encuentro se movía entonces por sutiles cambios de ánimo.
Dos errores no forzados de Badosa le hicieron perder el saque y dieron alas a Sakkari (2-0), pero la española, con una gran derecha paralela, rompió asimismo el servicio a la griega y tomó aire (2-1).
Sin embargo, la demoledora derecha de Sakkari volvió a darle un nuevo «break» (3-1) en el que a la postre resultó el juego clave del partido.
Tras muchos vaivenes, Sakkari se refugió en la solidez de su saque y acabó finalmente con el sueño de Badosa en Indian Wells.