Rubiales, sobre la entrega de medallas de la Supercopa femenina: «Fue una tremenda cagada»
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha calificado este martes como «una tremenda cagada» la polémica entrega de medallas de la Supercopa femenina, cuando las jugadoras tuvieron que colgárselas al cuello. «Fue, a nivel de imagen, desastroso», ha apuntado, puesto que «tiramos por tierra el trabajo que hayamos podido hacer» por el fútbol femenino.
Así se ha expresado el dirigente en una conversación con Risto Mejide en Viajado con Chester, donde ha matizado que la ceremonia se llevó a cabo de la misma manera que en la Copa del Rey masculina, donde no se colocaron las medallas, si no que se dieron en el césped, y en la pasada edición de la Supercopa femenina.
«¿Qué pasa? Que cinco días antes hemos entregado las medallas en la Supercopa masculina, y se compara con la femenina. No es una cuestión de discriminación», ha dejado claro, explicando que él siguió las instrucciones de protocolo.
Las campeonas de la Supercopa tuvieron que ponerse ellas mismas sus medallas.¿Un fallo de protocolo o cierto menosprecio al fútbol femenino?#ViajandoConChester #ChesterRubiales pic.twitter.com/99Yv6giccY— Viajando con Chester (@Chester_cuatro) March 7, 2023
El presidente ha revelado que al ver lo que estaba pasando comentó a su equipo que había que evitar que volviera a pasar, «porque con la sensibilidad que hay tiramos por tierra todo el buen trabajo que se pueda hacer, por una imagen, que es nefasta, en la que una mujer tiene que coger la medalla», aunque haya ocurrido también en la edición masculina.
Rubiales ha concluido que «no lo tienen que hacer ni las chicas, ni los chicos». «No es lo mismo», le ha dicho Mejide, algo en lo que ha coincidido el andaluz, que ha reconocido que «fue una tremenda cagada».
«Como máximo responsable, lo asumo. No hay que volver a hacerlo», ha asegurado, y ha detallado que actualmente hay registradas 100.000 licencias federativas de mujeres, por las 44.000 que había a su llegada, en la directiva de la RFEF hay el mismo número de mujeres que de hombres y «en la Federación no existe la brecha salarial». «Hemos trabajado muy duro, y una imagen así te tira por tierra», ha lamentado.
La RFEF y los derechos humanos en Qatar
El presidente de la Federación también ha abordado el papel de la selección española en la lucha por los derechos humanos durante el Mundial de Qatar. El combinado nacional no se unió a los nueve países que tenían la intención de lucir un brazalete arcoíris por los derechos del colectivo LGTBI, algo que finalmente no pudieron hacer tras la amenaza de la FIFA de sanciones deportivas, pero desde la RFEF anunciaron estar en negociaciones para presentar una iniciativa.
«Hicimos una presentación en Las Rozas con Naciones Unidas, donde pusimos de manifiesto una serie de acuerdos donde defendíamos los 17 puntos que se defienden con la ONU, entre ellos el derecho a que cada uno tenga su propia opción sexual», ha recordado.
Preguntado por lo que podrían haber hecho sobre el campo, Rubiales se ha preguntado «qué vamos a hacer». «Nosotros salimos al campo, nos ponemos nuestra equipación y jugamos un partido», ha apuntado. «La única manera en la que el deporte puede ayudar es entrando en la sociedad, de lleno» jugando la Copa del Mundo «y llevando lo que se hace en otros países», ha asegurado.
La marcha de Luis Enrique
Rubiales ha matizado el adiós de Luis Enrique como seleccionador nacional «no fue una destitución», sino una «no renovación», aunque ha elogiado el «trabajo fantástico» que hizo al frente de la Roja.
«No se le ha renovado porque había un informe claro del departamento deportivo que decía que había que hacer cosas diferentes», ha argumentado el presidente, aunque ha reconocido las «decisiones muy valientes» que el asturiano tomó, como darle la alternativa a jugadores jóvenes.
El presidente ha contado que tuvo una conversación con el técnico en la que no hablaron sobre su futuro al frente del combinado nacional, si no que fue José Francisco Molina el que comunicó a Luis Enrique la decisión de no renovarle.
Su relación, sin embargo, no ha cambiado. «Tengo una magnífica relación con él. Si alguna vez necesita algo de mí, o yo de él, ahí estaremos. Hemos vivido cosas muy bonitas y también muy duras», ha concluido.

El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha calificado este martes como "una tremenda cagada" la polémica entrega de medallas de la Supercopa femenina, cuando las jugadoras tuvieron que colgárselas al cuello. "Fue, a nivel de imagen, desastroso", ha apuntado, puesto que "tiramos por tierra el trabajo que hayamos podido hacer" por el fútbol femenino. Así se ha expresado el dirigente en una conversación con Risto Mejide en Viajado con Chester, donde ha matizado que la ceremonia se llevó a cabo de la misma manera que en la Copa del Rey masculina, donde no se colocaron las medallas, si no que se dieron en el césped, y en la pasada edición de la Supercopa femenina. "¿Qué pasa? Que cinco días antes hemos entregado las medallas en la Supercopa masculina, y se compara con la femenina. No es una cuestión de discriminación", ha dejado claro, explicando que él siguió las instrucciones de protocolo. Las campeonas de la Supercopa tuvieron que ponerse ellas mismas sus medallas.¿Un fallo de protocolo o cierto menosprecio al fútbol femenino?#ViajandoConChester #ChesterRubiales pic.twitter.com/99Yv6giccY— Viajando con Chester (@Chester_cuatro) March 7, 2023 El presidente ha revelado que al ver lo que estaba pasando comentó a su equipo que había que evitar que volviera a pasar, "porque con la sensibilidad que hay tiramos por tierra todo el buen trabajo que se pueda hacer, por una imagen, que es nefasta, en la que una mujer tiene que coger la medalla", aunque haya ocurrido también en la edición masculina. Rubiales ha concluido que "no lo tienen que hacer ni las chicas, ni los chicos". "No es lo mismo", le ha dicho Mejide, algo en lo que ha coincidido el andaluz, que ha reconocido que "fue una tremenda cagada". "Como máximo responsable, lo asumo. No hay que volver a hacerlo", ha asegurado, y ha detallado que actualmente hay registradas 100.000 licencias federativas de mujeres, por las 44.000 que había a su llegada, en la directiva de la RFEF hay el mismo número de mujeres que de hombres y "en la Federación no existe la brecha salarial". "Hemos trabajado muy duro, y una imagen así te tira por tierra", ha lamentado. La RFEF y los derechos humanos en Qatar El presidente de la Federación también ha abordado el papel de la selección española en la lucha por los derechos humanos durante el Mundial de Qatar. El combinado nacional no se unió a los nueve países que tenían la intención de lucir un brazalete arcoíris por los derechos del colectivo LGTBI, algo que finalmente no pudieron hacer tras la amenaza de la FIFA de sanciones deportivas, pero desde la RFEF anunciaron estar en negociaciones para presentar una iniciativa. "Hicimos una presentación en Las Rozas con Naciones Unidas, donde pusimos de manifiesto una serie de acuerdos donde defendíamos los 17 puntos que se defienden con la ONU, entre ellos el derecho a que cada uno tenga su propia opción sexual", ha recordado. Preguntado por lo que podrían haber hecho sobre el campo, Rubiales se ha preguntado "qué vamos a hacer". "Nosotros salimos al campo, nos ponemos nuestra equipación y jugamos un partido", ha apuntado. "La única manera en la que el deporte puede ayudar es entrando en la sociedad, de lleno" jugando la Copa del Mundo "y llevando lo que se hace en otros países", ha asegurado. La marcha de Luis Enrique Rubiales ha matizado el adiós de Luis Enrique como seleccionador nacional "no fue una destitución", sino una "no renovación", aunque ha elogiado el "trabajo fantástico" que hizo al frente de la Roja. "No se le ha renovado porque había un informe claro del departamento deportivo que decía que había que hacer cosas diferentes", ha argumentado el presidente, aunque ha reconocido las "decisiones muy valientes" que el asturiano tomó, como darle la alternativa a jugadores jóvenes. El presidente ha contado que tuvo una conversación con el técnico en la que no hablaron sobre su futuro al frente del combinado nacional, si no que fue José Francisco Molina el que comunicó a Luis Enrique la decisión de no renovarle. Su relación, sin embargo, no ha cambiado. "Tengo una magnífica relación con él. Si alguna vez necesita algo de mí, o yo de él, ahí estaremos. Hemos vivido cosas muy bonitas y también muy duras", ha concluido.
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha calificado este martes como «una tremenda cagada» la polémica entrega de medallas de la Supercopa femenina, cuando las jugadoras tuvieron que colgárselas al cuello. «Fue, a nivel de imagen, desastroso», ha apuntado, puesto que «tiramos por tierra el trabajo que hayamos podido hacer» por el fútbol femenino.
Así se ha expresado el dirigente en una conversación con Risto Mejide en Viajado con Chester, donde ha matizado que la ceremonia se llevó a cabo de la misma manera que en la Copa del Rey masculina, donde no se colocaron las medallas, si no que se dieron en el césped, y en la pasada edición de la Supercopa femenina.
«¿Qué pasa? Que cinco días antes hemos entregado las medallas en la Supercopa masculina, y se compara con la femenina. No es una cuestión de discriminación«, ha dejado claro, explicando que él siguió las instrucciones de protocolo.
Las campeonas de la Supercopa tuvieron que ponerse ellas mismas sus medallas.
¿Un fallo de protocolo o cierto menosprecio al fútbol femenino?#ViajandoConChester #ChesterRubiales pic.twitter.com/99Yv6giccY
— Viajando con Chester (@Chester_cuatro) March 7, 2023
El presidente ha revelado que al ver lo que estaba pasando comentó a su equipo que había que evitar que volviera a pasar, «porque con la sensibilidad que hay tiramos por tierra todo el buen trabajo que se pueda hacer, por una imagen, que es nefasta, en la que una mujer tiene que coger la medalla», aunque haya ocurrido también en la edición masculina.
Rubiales ha concluido que «no lo tienen que hacer ni las chicas, ni los chicos». «No es lo mismo», le ha dicho Mejide, algo en lo que ha coincidido el andaluz, que ha reconocido que «fue una tremenda cagada».
«Como máximo responsable, lo asumo. No hay que volver a hacerlo«, ha asegurado, y ha detallado que actualmente hay registradas 100.000 licencias federativas de mujeres, por las 44.000 que había a su llegada, en la directiva de la RFEF hay el mismo número de mujeres que de hombres y «en la Federación no existe la brecha salarial». «Hemos trabajado muy duro, y una imagen así te tira por tierra», ha lamentado.
La RFEF y los derechos humanos en Qatar
El presidente de la Federación también ha abordado el papel de la selección española en la lucha por los derechos humanos durante el Mundial de Qatar. El combinado nacional no se unió a los nueve países que tenían la intención de lucir un brazalete arcoíris por los derechos del colectivo LGTBI, algo que finalmente no pudieron hacer tras la amenaza de la FIFA de sanciones deportivas, pero desde la RFEF anunciaron estar en negociaciones para presentar una iniciativa.
«Hicimos una presentación en Las Rozas con Naciones Unidas, donde pusimos de manifiesto una serie de acuerdos donde defendíamos los 17 puntos que se defienden con la ONU, entre ellos el derecho a que cada uno tenga su propia opción sexual», ha recordado.
Preguntado por lo que podrían haber hecho sobre el campo, Rubiales se ha preguntado «qué vamos a hacer». «Nosotros salimos al campo, nos ponemos nuestra equipación y jugamos un partido», ha apuntado. «La única manera en la que el deporte puede ayudar es entrando en la sociedad, de lleno» jugando la Copa del Mundo «y llevando lo que se hace en otros países», ha asegurado.
La marcha de Luis Enrique
Rubiales ha matizado el adiós de Luis Enrique como seleccionador nacional «no fue una destitución», sino una «no renovación», aunque ha elogiado el «trabajo fantástico» que hizo al frente de la Roja.
«No se le ha renovado porque había un informe claro del departamento deportivo que decía que había que hacer cosas diferentes«, ha argumentado el presidente, aunque ha reconocido las «decisiones muy valientes» que el asturiano tomó, como darle la alternativa a jugadores jóvenes.
El presidente ha contado que tuvo una conversación con el técnico en la que no hablaron sobre su futuro al frente del combinado nacional, si no que fue José Francisco Molina el que comunicó a Luis Enrique la decisión de no renovarle.
Su relación, sin embargo, no ha cambiado. «Tengo una magnífica relación con él. Si alguna vez necesita algo de mí, o yo de él, ahí estaremos. Hemos vivido cosas muy bonitas y también muy duras», ha concluido.