Una Liga dominada con puño de hierro por el Real Madrid

El Real Madrid ha sido justo campeón de una Liga que ha dominado casi de principio a fin y en la que ha sido el líder en todas las jornadas menos en una. Las dudas sobre el proyecto de Ancelotti no tardaron en disiparse gracias al buen juego del equipo blanco y al paso adelante de jugadores como Benzema (indiscutible MVP de la competición) Vinícius (en el año de su consagración), Courtois (pocos dudan que es el mejor portero del mundo en estos momentos) y Militao (líder de la defensa post-Ramos).
El conjunto madridista cogió una buena renta inicial, superó un bache en enero-febrero y acabó sentenciando con victorias de gran mérito a domicilio en Vigo, Sevilla y Pamplona.
Liderato en agosto… y explota Vini
El plan inicial de Ancelotti era formar un tridente con Bale y Hazard junto a Benzema. Así salió en la goleada en Mendizorroza al Alavés (1-4) que puso primero a los madridistas y el empate en el Ciutat ante el Levante (3-3) que le hizo perder el liderato en la jornada 2, única en la que no comandó la tabla.
En esos partidos ya comenzó a dejar claro Vinícius que no estaba para ser suplente en este equipo y ya ante el Betis (0-1, gol de Carvajal), jornada 3, le quitó el sitio a Hazard. El primer parón de selecciones supuso que Gareth Bale desapareciera entre lesiones, falta de compromiso y su verdadera prioridad: Gales.
Vuelta al Santiago Bernabéu
El 12 de septiembre, el Real Madrid volvió a jugar en un Santiago Bernabéu en obras, algo que no sucedía desde marzo de 2020. El regreso fue con una goleada al Celta (2-5). Después, la visita a Mestalla dejó la primera gran remontada del equipo blanco, convertido en su sello de identidad: un 1-2 gracias a los goles de Vinícius (minuto 86) y Benzema (88).
La goleada ante el Mallorca (6-1) con un hat-trick de Marco Asensio desbordó la alegría, frenada rápidamente con el empate en casa ante el Villarreal (0-0) y una inesperada derrota ante el Espanyol (2-1).
Golpe a Koeman en el Camp Nou
Las dudas originadas por los dos tropiezos ligueros y una chocante derrota ante el Sheriff en la Champions fueron finiquitadas en el Camp Nou ante un pobre Barcelona. Un gol de Alaba y otro de Lucas Vázquez sentenciaron a los culés, que maquillaron en el descuento gracias a un gol de Agüero, a la postre último de su carrera.
La victoria blanca dejó muy tocado a Ronald Koeman y demostró la superioridad madridista.
Gran racha: siete seguidas
siete seguidas. Otro 0-0 en el Bernabéu, esta vez ante Osasuna, fue un tropiezo menor ante las victorias en Elche (1-2, doblete de Vinícius), Rayo Vallecano (2-1 con mucho sufrimiento), Granada (1-4), Sevilla (2-1), Athletic (1-0), RealSociedad (0-2) y Atlético de Madrid (2-0).
La racha acabó ante el Cádiz en el Bernabéu (0-0), pero esos siete triunfos le habían dado un estocazo a la Liga, especialmente tras ganar en el campo de uno de los entonces candidatos (Reale Arena) y en el Bernabéu ante dos rivales directos como Sevilla y Atlético de Madrid. Para acabar el año, el Madrid logró vencer en otro durísimo campo, San Mamés (1-2, doblete de Benzema).
El bache: mal inicio de año
El RealMadrid abrió el 2022 con una derrota en Getafe (1-0) y las dudas llegaron al conjunto blanco.Una goleada ante el Valencia (4-1) fue un espejismo, pues después llegó un empate –y gracias– en casa ante el Elche (2-2), una sufrida victoria ante el Granada (1-0, Asensio) y un empate en Villarreal (0-0).
Tras ganar con más apuros de los esperados al Alavés (3-0, resultado engañoso) y también alRayo (0-1, Benzema en el 83), de nuevo se vio al mejor Real Madrid ante la Real Sociedad (4-1) y en Mallorca (0-3).
El clásico: goleada azulgrana
El Barça parecía estar de vuelta. Sin Benzema, el Real Madrid se vino abajo y fue aplastado por los azulgranas, tremendamente superiores en elBernabéu. La superioridad fue tal que el 0-4 le supo a poco al equipo de Xavi Hernández. Había Liga, tanto Sevilla como Barcelona estaban en la pelea.
Carácter y gran reacción
Sin mostrar un juego brillante, el Real Madrid fue capaz de sacar adelante sus partidos en Vigo (1-2) y ante elGetafe (2-0). Y entonces llegó el momento clave, la visita al Pizjuán apenas cuatro días después de pasar a las semifinales de la Champions pese a ser superado por el Chelsea.
El Sevilla se puso 2-0 y la Liga ardía en ese momento: el Barça, ganando sus dos partidos, se podía poner a seis puntos. Sin embargo, una increíble remontada (2-3, con gol final de Benzema) dejó el campeonato casi sentenciado.
Los tropiezos tanto de azulgranas como de sevillistas y el mal año del Atlético daban vía libre al Real Madrid, que también ganó en El Sadar (1-3). Un empate ante el Espanyol era suficiente, y los de Ancelotti golearon (4-0) para llevar la Liga 35 a las vitrinas blancas.

Una Liga dominada con puño de hierro por el Real Madrid

El Real Madrid ha sido justo campeón de una Liga que ha dominado casi de principio a fin y en la que ha sido el líder en todas las jornadas menos en una. Las dudas sobre el proyecto de Ancelotti no tardaron en disiparse gracias al buen juego del equipo blanco y al paso adelante de jugadores como Benzema (indiscutible MVP de la competición) Vinícius (en el año de su consagración), Courtois (pocos dudan que es el mejor portero del mundo en estos momentos) y Militao (líder de la defensa post-Ramos). El conjunto madridista cogió una buena renta inicial, superó un bache en enero-febrero y acabó sentenciando con victorias de gran mérito a domicilio en Vigo, Sevilla y Pamplona. Liderato en agosto... y explota Vini El plan inicial de Ancelotti era formar un tridente con Bale y Hazard junto a Benzema. Así salió en la goleada en Mendizorroza al Alavés (1-4) que puso primero a los madridistas y el empate en el Ciutat ante el Levante (3-3) que le hizo perder el liderato en la jornada 2, única en la que no comandó la tabla. En esos partidos ya comenzó a dejar claro Vinícius que no estaba para ser suplente en este equipo y ya ante el Betis (0-1, gol de Carvajal), jornada 3, le quitó el sitio a Hazard. El primer parón de selecciones supuso que Gareth Bale desapareciera entre lesiones, falta de compromiso y su verdadera prioridad: Gales. Vuelta al Santiago Bernabéu El 12 de septiembre, el Real Madrid volvió a jugar en un Santiago Bernabéu en obras, algo que no sucedía desde marzo de 2020. El regreso fue con una goleada al Celta (2-5). Después, la visita a Mestalla dejó la primera gran remontada del equipo blanco, convertido en su sello de identidad: un 1-2 gracias a los goles de Vinícius (minuto 86) y Benzema (88). La goleada ante el Mallorca (6-1) con un hat-trick de Marco Asensio desbordó la alegría, frenada rápidamente con el empate en casa ante el Villarreal (0-0) y una inesperada derrota ante el Espanyol (2-1). Golpe a Koeman en el Camp Nou Las dudas originadas por los dos tropiezos ligueros y una chocante derrota ante el Sheriff en la Champions fueron finiquitadas en el Camp Nou ante un pobre Barcelona. Un gol de Alaba y otro de Lucas Vázquez sentenciaron a los culés, que maquillaron en el descuento gracias a un gol de Agüero, a la postre último de su carrera. La victoria blanca dejó muy tocado a Ronald Koeman y demostró la superioridad madridista. Gran racha: siete seguidas siete seguidas. Otro 0-0 en el Bernabéu, esta vez ante Osasuna, fue un tropiezo menor ante las victorias en Elche (1-2, doblete de Vinícius), Rayo Vallecano (2-1 con mucho sufrimiento), Granada (1-4), Sevilla (2-1), Athletic (1-0), RealSociedad (0-2) y Atlético de Madrid (2-0). La racha acabó ante el Cádiz en el Bernabéu (0-0), pero esos siete triunfos le habían dado un estocazo a la Liga, especialmente tras ganar en el campo de uno de los entonces candidatos (Reale Arena) y en el Bernabéu ante dos rivales directos como Sevilla y Atlético de Madrid. Para acabar el año, el Madrid logró vencer en otro durísimo campo, San Mamés (1-2, doblete de Benzema). El bache: mal inicio de año El RealMadrid abrió el 2022 con una derrota en Getafe (1-0) y las dudas llegaron al conjunto blanco.Una goleada ante el Valencia (4-1) fue un espejismo, pues después llegó un empate –y gracias– en casa ante el Elche (2-2), una sufrida victoria ante el Granada (1-0, Asensio) y un empate en Villarreal (0-0). Tras ganar con más apuros de los esperados al Alavés (3-0, resultado engañoso) y también alRayo (0-1, Benzema en el 83), de nuevo se vio al mejor Real Madrid ante la Real Sociedad (4-1) y en Mallorca (0-3). El clásico: goleada azulgrana El Barça parecía estar de vuelta. Sin Benzema, el Real Madrid se vino abajo y fue aplastado por los azulgranas, tremendamente superiores en elBernabéu. La superioridad fue tal que el 0-4 le supo a poco al equipo de Xavi Hernández. Había Liga, tanto Sevilla como Barcelona estaban en la pelea. Carácter y gran reacción Sin mostrar un juego brillante, el Real Madrid fue capaz de sacar adelante sus partidos en Vigo (1-2) y ante elGetafe (2-0). Y entonces llegó el momento clave, la visita al Pizjuán apenas cuatro días después de pasar a las semifinales de la Champions pese a ser superado por el Chelsea. El Sevilla se puso 2-0 y la Liga ardía en ese momento: el Barça, ganando sus dos partidos, se podía poner a seis puntos. Sin embargo, una increíble remontada (2-3, con gol final de Benzema) dejó el campeonato casi sentenciado. Los tropiezos tanto de azulgranas como de sevillistas y el mal año del Atlético daban vía libre al Real Madrid, que también ganó en El Sadar (1-3). Un empate ante el Espanyol era suficiente, y los de Ancelotti golearon (4-0) para llevar la Liga 35 a las vitrinas blancas.

El Real Madrid ha sido justo campeón de una Liga que ha dominado casi de principio a fin y en la que ha sido el líder en todas las jornadas menos en una. Las dudas sobre el proyecto de Ancelotti no tardaron en disiparse gracias al buen juego del equipo blanco y al paso adelante de jugadores como Benzema (indiscutible MVP de la competición) Vinícius (en el año de su consagración), Courtois (pocos dudan que es el mejor portero del mundo en estos momentos) y Militao (líder de la defensa post-Ramos).

El conjunto madridista cogió una buena renta inicial, superó un bache en enero-febrero y acabó sentenciando con victorias de gran mérito a domicilio en Vigo, Sevilla y Pamplona.

Liderato en agosto… y explota Vini

El plan inicial de Ancelotti era formar un tridente con Bale y Hazard junto a Benzema. Así salió en la goleada en Mendizorroza al Alavés (1-4) que puso primero a los madridistas y el empate en el Ciutat ante el Levante (3-3) que le hizo perder el liderato en la jornada 2, única en la que no comandó la tabla.

En esos partidos ya comenzó a dejar claro Vinícius que no estaba para ser suplente en este equipo y ya ante el Betis (0-1, gol de Carvajal), jornada 3, le quitó el sitio a Hazard. El primer parón de selecciones supuso que Gareth Bale desapareciera entre lesiones, falta de compromiso y su verdadera prioridad: Gales.

Vuelta al Santiago Bernabéu

El 12 de septiembre, el Real Madrid volvió a jugar en un Santiago Bernabéu en obras, algo que no sucedía desde marzo de 2020. El regreso fue con una goleada al Celta (2-5). Después, la visita a Mestalla dejó la primera gran remontada del equipo blanco, convertido en su sello de identidad: un 1-2 gracias a los goles de Vinícius (minuto 86) y Benzema (88).

La goleada ante el Mallorca (6-1) con un hat-trick de Marco Asensio desbordó la alegría, frenada rápidamente con el empate en casa ante el Villarreal (0-0) y una inesperada derrota ante el Espanyol (2-1).

Golpe a Koeman en el Camp Nou

Las dudas originadas por los dos tropiezos ligueros y una chocante derrota ante el Sheriff en la Champions fueron finiquitadas en el Camp Nou ante un pobre Barcelona. Un gol de Alaba y otro de Lucas Vázquez sentenciaron a los culés, que maquillaron en el descuento gracias a un gol de Agüero, a la postre último de su carrera.

La victoria blanca dejó muy tocado a Ronald Koeman y demostró la superioridad madridista.

Gran racha: siete seguidas

siete seguidas. Otro 0-0 en el Bernabéu, esta vez ante Osasuna, fue un tropiezo menor ante las victorias en Elche (1-2, doblete de Vinícius), Rayo Vallecano (2-1 con mucho sufrimiento), Granada (1-4), Sevilla (2-1), Athletic (1-0), RealSociedad (0-2) y Atlético de Madrid (2-0).

La racha acabó ante el Cádiz en el Bernabéu (0-0), pero esos siete triunfos le habían dado un estocazo a la Liga, especialmente tras ganar en el campo de uno de los entonces candidatos (Reale Arena) y en el Bernabéu ante dos rivales directos como Sevilla y Atlético de Madrid. Para acabar el año, el Madrid logró vencer en otro durísimo campo, San Mamés (1-2, doblete de Benzema).

El bache: mal inicio de año

El RealMadrid abrió el 2022 con una derrota en Getafe (1-0) y las dudas llegaron al conjunto blanco.Una goleada ante el Valencia (4-1) fue un espejismo, pues después llegó un empate –y gracias– en casa ante el Elche (2-2), una sufrida victoria ante el Granada (1-0, Asensio) y un empate en Villarreal (0-0).

Tras ganar con más apuros de los esperados al Alavés (3-0, resultado engañoso) y también alRayo (0-1, Benzema en el 83), de nuevo se vio al mejor Real Madrid ante la Real Sociedad (4-1) y en Mallorca (0-3).

El clásico: goleada azulgrana

El Barça parecía estar de vuelta. Sin Benzema, el Real Madrid se vino abajo y fue aplastado por los azulgranas, tremendamente superiores en elBernabéu. La superioridad fue tal que el 0-4 le supo a poco al equipo de Xavi Hernández. Había Liga, tanto Sevilla como Barcelona estaban en la pelea.

Carácter y gran reacción

Sin mostrar un juego brillante, el Real Madrid fue capaz de sacar adelante sus partidos en Vigo (1-2) y ante elGetafe (2-0). Y entonces llegó el momento clave, la visita al Pizjuán apenas cuatro días después de pasar a las semifinales de la Champions pese a ser superado por el Chelsea.

El Sevilla se puso 2-0 y la Liga ardía en ese momento: el Barça, ganando sus dos partidos, se podía poner a seis puntos. Sin embargo, una increíble remontada (2-3, con gol final de Benzema) dejó el campeonato casi sentenciado.

Los tropiezos tanto de azulgranas como de sevillistas y el mal año del Atlético daban vía libre al Real Madrid, que también ganó en El Sadar (1-3). Un empate ante el Espanyol era suficiente, y los de Ancelotti golearon (4-0) para llevar la Liga 35 a las vitrinas blancas.