Murcia prepara un gran estadio para el Mundial 2030 de fútbol… pero los problemas políticos dificultan la candidatura

Murcia quiere ser parte del Mundial 2030 con el estadio Enrique Roca. Su candidatura, sin embargo, arrastra problemas políticos que hacen complicada su elección entre las sedes para los partidos de la Copa del Mundo en España, que comparte organización con Portugal y Marruecos.

El campo del Real Murcia, con capacidad para 31.179 espectadores, necesita acometer una importante reforma para ser aspirante, lo que supone una cuantiosa inversión económica que ha provocado dudas en el Ayuntamiento y el Gobierno de la Región a la hora de presentar la petición oficial ante la FIFA.

Sin ir más lejos, el consistorio murciano emitió este pasado viernes un comunicado en el que insistió en su «firme interés por ser sede del campeonato mundial», asumiendo de esta manera «todo el gasto corriente derivado del evento internacional», pero recordando que «el gasto previsto en inversiones y ampliación de infraestructuras puede superar los 70 millones de euros».

Esa desembolso, considera el Ayuntamiento, no puede ser asumido por los murcianos, sino que «debe venir de otras fuentes de financiación, públicas o privadas, como pasó con motivo del Mundial de 1982». Por eso, el Gobierno municipal abogó por la «creación de un comité organizador estatal, que sea el que se haga cargo de la búsqueda de fondos, la coordinación de la seguridad y de la renovación, ampliación y/o creación de nuevas infraestructuras».

El proyecto del Enrique Roca

El proyecto para reformar el Enrique Roca, inaugurado en 2006 como estadio Nueva Condomina, prevé el aumento del aforo hasta los 43.048 asientos, elevando el anillo superior y la cubierta, y la instalación de un vídeomarcador de 360 grados, así como una nueva estructura para la nueva cubierta, las nuevas gradas, el marcador y un cerramiento de cristal que permita la entrada del sol, tal y como recoge el diario La Verdad.

El Consistorio, además, también anunció en una nota de prensa en la que informaba del anteproyecto de reforma del recinto, «la construcción de un nuevo edificio anexo de tres plantas con una superficie de ampliación de más de 15.000 metros cuadrados», y distintas alternativas para la ampliación del aparcamiento en la parte exterior.

Por otro lado, el Ayuntamiento proponía la «sustitución de la tecnología de halogenuro metálico actualmente existente por 250 proyectores de tecnología LED con una potencia unitaria de 1.500W para garantizar el nivel de iluminación exigido por FIFA de 2.000 Lux», así como una «instalación solar fotovoltaica de 6.000 metros cuadrados con el fin de garantizar que el 75% de la potencia total consumida provenga de fuentes renovables».